RECETAS PERDIDAS DE LA TABERNA KAMOGAWA, LAS (TABERNA KAMOGAWA 3). Entren en la taberna Kamogawa, el fenómeno japonés que triunfa en todo el mundo.
Una serie deliciosa que mezcla todo el encanto de Japón con el placer y la sensualidad de la comida.
Regentada por el antiguo policía Nagare Kamogawa y su hija Koishi, y disimulada entre las populosas calles de Kioto, se halla la taberna Kamogawa, un pequeño local donde se puede comer maravillosamente bien... y reencontrar el plato que ha marcado nuestras vidas. Porque, gracias a los recuerdos a menudo borrosos de los clientes, padre e hija, investigadores gastronómicos, recomponen cada receta perdida con insólita eficacia: los ingredientes y su origen, los tiempos y maneras de preparación e incluso los personalísimos secretos culinarios de los cocineros originales. Al fin y al cabo, de lo que se trata es de recrear sabores únicos salpicados de nostalgia.
Poética y luminosa, Las recetas perdidas de la taberna Kamogawa, tercer libro de la exitosa serie, combina magistralmente personajes entrañables y tramas sazonadas con una pizca de misterio. Homenaje conmovedor y algo exótico al poder evocativo de la comida, los seis casos de esta novela serán degustados con deleite por los amantes de los placeres de la cocina y la cultura japonesa.
La crítica ha dicho...
«Entren en la taberna Kamogawa y déjense llevar al pasado de los sabores y los aromas a través de una narración mágica y repleta de emoción que te conquista desde el primer bocado.»
Jesús Lens, Ideal Gourmet
«La pareja de detectives gastronómicos formada por el padre y la hija de la taberna Kamogawa se hanespecializado en preparar el plato que el público anhela y recuerda de su pasado. [...] Deliciosa.»
Aloña Fernández Larrechi, mujerhoy
«Hisashi Kashiwai ha revolucionado el mercado editorial mundial con esta historia de detectives que combina el misterio y la gastronomía.»
El Mundo
«Delicioso en todos los sentidos.»
Babelia
«Personalísimos casos que se plantean en la sombra de un pequeño restaurante de Tokio, siempre vinculados al mundo de los recuerdos gustativos. [...] Una buena dosis de misterio, mucha gastronomía y felices finales.»
Sara Cucala, El País